Si una pobre vaca despistada pasa caminando por Bombero Ossa y tentada por los aromas de Salvador cocina y café llega a ingresar a este recinto, se los firmo aquí: se la van a comer completa, completa.

Así es este lugar, el cielo para los carnívoros atrevidos, los nombres “Mollejas”, “charchas”, “Pernil”, “Guatitas”, “Panitas” reinan en la carta y todo es para chuparse los deditos, sin comérselos también eso si.

El Salvador cocina y café está en un pasaje en pleno centro de Santiago, tiene mesas con manteles de plásticos al más estilo club social de los 80, cucharones colgando de las paredes, platitos preciosos y unos mozos muy adorables.

Tienen un menú de tres opciones de entradas y fondos cada día y todas te hacen salivar exageradamente. Cuando fuimos elegimos una sopa de zapallo, muy rica y con hartas cositas que le daban textura.

De fondo unas charchas de vaca con risotto. El sabor era para desmayarse. Lo único fome era que tenían mucha grasa, pero estaban deliciosas y de postre una especie de sopa de frutos rojos con unos frutos secos, lo menos increíble de todo, pero te lo comías con ganas igual. El jugo era un ice tea maravilloso. Todo esto cuesta $9.900 y es para irse corriendo a dormir siesta. Ojo que también aquí se ama el chancho.

Detalles

Bombero Ossa 1059, Santiago centro.

Facebook: SalvadorCocinaYCafe

 

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