“Qué lugar más ameno y agradable,  fíjate” hubiera dicho mi abuela de La Estación Comedor, este restaurant que vende menú, lamentablemente cada vez más caro, pero maravillosamente rico y contundente.

Tiene una terraza muy linda donde uno puede conversar libremente, cosas que a uno le importan ya más de vieja, y donde se come bien en serio.

Una opción es pedir el siempre delicioso menú, que es un jugo + pancito rico + sopa + postre + plato de fondo. El fondo jamás nos ha defraudado, nos ha tocado lentejas, carne con puré, chancho con arroz, infinitas opciones, lasagna, todo siempre muy rico y con buenos productos. La última vez nos pedimos un fricasé que estaba para chupar el plato, no lo hicimos sólo porque la gente que va a comer para allá es siempre muy distinguida y los hubiera escandalizado.

Los postres son siempre unas preciosuras, tipo quequito de limón con helado de pétalos de flor de los 7 colores. El resto de la carta casi nunca la probamos pero debe ser igual de bueno que todo y hay ensaladas, unas pastas y sangururus que tienen una pinta increíble como para ir a pedir pega.

El menú cuesta $8.900 (al menos la última vez que fuimos).

La Estación Comedor, Antonio de Pastrana 2529, Vitacura, Santiago