Recién estrenado y causando sensación. Este restaurante comandado por Moma Adrianzén viene a replicar lo que ya en Lima es un hit, sin ser un restaurante de cocina peruana pero sí uno de comida callejera, inspirada por sabores fáciles de comprender, ingredientes fresquísimos y una destacable abundancia en cada porción. Vamos a destacar, primero que todo, que este lugar está bellísimo, bien decorado e iluminado a la perfección con calidez y elegancia. Abundan las plantas en un espacio grande, llamativo y moderno y desde afuera, la presencia de Jerónimo provoca ganas de entrar.

Si bien obviamente predominan las técnicas de la gastronomía limeña, aquí siento que todos los platos van un paso más allá, con propuestas innovadoras y juegos de texturas que son lo que más me gusta. Mientras un tiradito de pescado estilo peruano puede ser incluso ahumado, vemos también como otros platos con matices de otros países, y es que Moma se ha inspirado en los distintos lugares donde ha viajado para rescatar los mejores sabores y llevarlos a Jerónimo con un sello personal e ingredientes de calidad. Por eso en su carta vemos desde ceviches hasta hamburguesas, tacos e incluso pastas.

Dentro de mis favoritos están los tiradito de pescado, uno ahumado y otro crocante, pero ambos fresquísimos y con tonos picantes gracias al rocoto o ají amarillo. Luego están los conos de wantán rellenos con salmón, palta y alioli que están tremendos de buenos, al igual que los tacos de costillar de cerdo… ¡Una maravilla! El chancho sabroso, fácil de desmenuzar para incorporar en las masas de maíz que tan importantes son para alcanzar el verdadero “mexican flavor”. Otro hit fueron las coliflores fritas y que con un toque de limón pueden convertirse en una de las preparaciones más deliciosas para los mañosos de esta verdura… un must en este lugar. Ojo también con los postres, puras bombas de sabor… y con la coctelería, que sin bien no es mi tema, se nota que hay una propuesta extensa y distinta basada en combinaciones sencillas pero ricas. Este Jerónimo va a dar que hablar, una propuesta que no debieran dejar de probar.

 

Dirección: Alonso de Córdova 3102, Vitacura